19 ene 2009


Te sentaste a mi lado, como la poesía junto al vino,
tras la ventana vi luces de neón de color amarillo.
Cogí tu mano mientras decidías qué hacer,
el único beso que echo de menos lo compartí contigo.
Las demás ciudades solo son recuerdos de lugares.
Pero cuando sueño con Londres, solo te veo a ti.

Te quiero a ti
o a nadie.
Nadie servirá.
Tú o nadie.
Nadie es el único
que llenará este espacio que guardo para ti.

Me redujiste a eslóganes en la pared.
Yo me ofendí, pero tenías razón sobre ellos.
Mis amigos me dicen que no debería perder el tiempo,
pero no me podré concentrar hasta que no seas mío.
Dibujo cartas y le pido deseos al fondo de un pozo,
quién habría dicho que me perdería en ese viejo hotel…

Te quiero a ti,
o a nadie.
Nadie está hecho para mí.
Tú, o nadie.
Porque nadie más es lo suficientemente fuerte, lo suficientemente fuerte,
para pararme a tiempo y liberarme.
Te quiero a ti,
o a nadie más.
Nadie más me sirve.
Oh, tú, o nadie.
Nadie es el único
que me llenará hasta que te haga mío.



Aquí está.

1 comentario:

Ann dijo...

Gracias, bonita.

...Eva through the Looking-Glass.

...Eva through the Looking-Glass.